Si la innovación era importante, la pandemia puso de relieve que es esencial para que las empresas sobrevivan.
La pandemia provocada por el coronavirus que puso en jaque al mundo entero desde el año pasado ha hecho que la innovación empresarial sea aún más indispensable para que las compañías sobrevivan en el tiempo.
Porque lo que es un hecho es que aquellas organizaciones que innovan son las que tienen más oportunidades de tener un futuro.
Los ejemplos más conocidos están ahí: Kodak, Blockbuster, Polaroid, Toys R us o Compaq. Si una empresa no busca hacer las cosas distinto e incorporar la innovación a sus procesos, en algún momento será rebasada por sus competidores.
En este sentido, algunas compañías hicieron lo suyo en esta cuarentena. Se aliaron para utilizar su tecnología de manera abierta y le dieron más peso a ello que a la generación de recursos.
Durante los meses de pandemia se observó que las empresas “empezaron a unirse para trabajar abiertamente a un nivel de precedentes, anteponiendo la capacidad de crear valor a la oportunidad de ganar dinero”, de acuerdo con una investigación publicada en la Harvard Business Review que asegura que los tiempos de COVID-19 son perfectos para la “innovación abierta”.
Por ejemplo, la multinacional alemana Siemens, que abrió su red de fabricación a cualquiera que necesitara ayuda en el diseño de dispositivos médicos. O Ford y 3M, que trabajaron juntas con el objetivo de desarrollar también dispositivos médicos a través de su tecnología disponible. La creación de valor, sea cual sea la razón, siempre traerá beneficios a las organizaciones.
¿Por qué? Porque la innovación, sea abierta como en estos ejemplos o no, tiene el gran potencial, entre otras cosas, de generar una gran cantidad de valor para las organizaciones. Este valor puede generarse ya sea a través de nuevos productos, socios, líneas de distribución, cadenas de producción, o en general, de cualquier forma que resulte de hacer las cosas de forma distinta.
Innovación empresarial de emergencia
Ya sea innovación abierta o como una manifestación de lucha de supervivencia, estos tiempos han puesto el foco en la importancia de la innovación empresarial. Hong Luo and Alberto Galasso, ambos profesores de negocios y autores de un artículo para la Harvard Business School, que, en estos tiempos, las organizaciones “se ven obligadas a ser más inteligentes”.
Por ejemplo, si antes de la crisis las organizaciones pudieron haber considerado muy costosa la inversión de tiempo y recursos para experimentar con el trabajo remoto, el último año les hizo quedarse sin opciones y tener que lanzarse al ruedo debido a las circunstancias, explican los investigadores.
Para los autores, “si algo bueno causó la pandemia por la COVID-19 fue la innovación”.
No solo las compañías tuvieron que acelerar procesos como el trabajo remoto, sino que tuvieron que ajustarse a nuevos patrones de consumo de las personas. Esto trajo nuevas oportunidades comerciales que han tenido que enfrentarse con automatización, digitalización y la generación de nuevos productos, servicios y modelos comerciales.
“Dar prioridad a la innovación hoy en día es la clave para desbloquear el crecimiento posterior a la crisis”, de acuerdo con un estudio de la consultora McKinsey.
Innovación empresarial en México y América Latina en tiempos de COVID-19
La pandemia generó cambios a nivel mundial y México y América Latina no se quedaron atrás. Un estudio de Visa reveló un aumento en 24% de compañías innovadoras en estado avanzado y maduro con respecto al análisis anterior realizado un año y medio antes.
“Este estudio destaca que la pandemia de COVID-19 ayudó a impulsar esta tendencia en la región”, sostiene el documento. Y en este sentido, incluso el virus podría haber sido “la fuerza más poderosa” que haya experimentado la región para impulsar la digitalización.
Este análisis, el cual pone énfasis en los métodos de pago, arroja un dato interesante. Que aquellas empresas que ya estaban encaminadas hacia la digitalización y la innovación en sus pagos estuvieron mejor posicionadas. Estas, reaccionaron con rapidez y efectividad ante las necesidades de los consumidores.
No solo en el tema de pagos, sino en general. La innovación prepara a las organizaciones para los cambios que están por venir. Además de que las coloca por encima de sus competidores, al permitirles crear soluciones que a otros no se les habían ocurrido.
La innovación les permite sobrevivir en el tiempo
El libro “100 familias que cambiaron al mundo”, demuestra que si estas empresas han logrado sobrevivir al siglo de vida, ha sido por sus procesos innovadores.
Escrito por Josep Tàpies, titular de la Cátedra de Empresa Familiar en la IESE Business School de la Universidad de Navarra, estudia los casos de compañías como Bosch, Swarowski, The New York Times o Ford y narra cómo, desde sus fundadores, la preocupación por hacer algo distinto fue algo cotidiano al interior de las organizaciones.
Al respecto, el autor asegura que la innovación es el motor de la supervivencia de toda compañía. En el momento de la pandemia, las organizaciones la voltearon a ver también como un salvavidas ante la emergencia e incertidumbre.
Las crisis también son sinónimo de nuevas oportunidades.
Las compañías necesitan voltear a ver a los procesos innovadores como una forma de seguir avanzando y de asegurar una larga vida. Se trata de implementar tecnología al interior pero no solo eso, sino que la innovación puede implementarse en cualquier área o proceso.
Algunas organizaciones lo hacen solas, otras necesitan ayuda. En iLab, nos dedicamos desde hace siete años a impulsar a las empresas y emprendedores para diseñar productos innovadores y a hacer que estos puedan incorporar la innovación en su ADN como una manera de asegurar su crecimiento en el tiempo.