El aspecto financiero a la hora de emprender muchas veces no es valorado por los emprendedores, por lo que se aventuran sin tener los conocimientos básicos para manejar el dinero y para administrar su compañía.
Sin embargo, conocer sobre finanzas en una empresa es esencial para que esta pueda llegar a buen puerto. Si no basta ver los negocios que fracasan por esta causa.
El Libro del fracaso, una investigación realizada por Fuck Up Nights y por el Instituto de Emprendimiento Eugenio Garza Lagúera, encontró que la principal causa de fracaso de los emprendedores tiene que ver con el área de finanzas.
“Yo siempre he sido muy poco financiero y administrativo, son cosas que ni siquiera me gustan y abiertamente lo aborrezco”
“Este proyecto fracasó por una mala planeación financiera y por no contar con una estructura profesional acorde al alcance del proyecto…”
Estos son comentarios de los empresarios que fracasaron en el intento y que fueron entrevistados para realizar este estudio. Este análisis se publicó ya hace algunos años pero sirve para entender la importancia de tomar en cuenta las finanzas de una empresa a la hora de planear y seguir adelante en su fundación.
En general, este análisis encontró que todo lo que tenga que ver con números, contabilidad o cálculo de los presupuestos, son temas que dan miedo o fastidio al emprendedor, por lo que este ni siquiera busca capacitación.
Hacer una buena planeación financiera
El análisis de Fuck Up Nights y del Instituto de Emprendimiento Eugenio Garza Lagüera del Tecnológico de Monterrey encontró que no tener ingresos suficientes para subsistir fue la mención más frecuente (65% de los emprendedores) como motivo de fracaso.
No importaba si la idea de negocios era buena, sino que simplemente esta no les dejaba el suficiente ingreso para sobrevivir.
Pero, ¿a qué se debe este fracaso en las finanzas de una empresa? Todo apunta a que está relacionado con una mala planeación financiera.
La planificación financiera consiste en la elaboración de un presupuesto que contemple los objetivos de corto, mediano y largo plazo de la empresa, y que garantice su rentabilidad a través del tiempo. Este documento contempla que la empresa tenga las condiciones de liquidez, rentabilidad y solvencia necesarias para sobrevivir a largo plazo.
Así que una de las claves para que una empresa sobreviva en el tiempo es que sea rentable y sea lo suficientemente productiva para seguir operando.
Crear un fondo de emergencia
En los negocios, una de las únicas certezas es la incertidumbre. Este último año nos ha demostrado que, para seguir adelante, es esencial estar preparado para todo aquello que se sale de los planes. Precisamente para eso, está un fondo de emergencia. Este es una reserva de dinero que sirve tanto para épocas malas como para buscar oportunidades empresariales nuevas, según explica el especialista en finanzas, David Ramsey.
“Al igual que un fondo de emergencia personal, el fondo de emergencia de tu negocio te dará la confianza que necesitas cuando los vientos difíciles golpean la puerta. Y no solo estamos hablando de una pandemia mundial. Estamos hablando de si te enfermas, si un empleado importante se ausenta; si te demandan o si tu temporada baja es más larga de lo que esperabas”, sostiene Ramsey.
Ahorrar cierta cantidad de dinero y tenerla preparada para emergencias evita que en el momento de la crisis tengas que pedir un préstamo porque, ¿quién asegura que vas a poder devolver los préstamos si vuelve a suceder otra crisis?, plantea este especialista. Si tienes deudas, no importa. Dedica la mayoría de tu capital a pagarlas y un porcentaje menor a ahorrar para este fondo de emergencia.
Pon atención al pago de impuestos
Pagar el tributo fiscal es algo muy importante si las empresas no quieren recibir multas y sanciones que puedan afectar su supervivencia a largo plazo.
En México y en general en América Latina, la mayoría de las empresas se encuentra en el sector informal. Esto debido, entre otras cosas, a una regulación poco favorable, a la falta de Estado de derecho que promueva un ambiente de extorsión y a la falta de políticas diseñadas para favorecer la competitividad, según explica el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Sin embargo, estar en la informalidad, más que beneficiar a las empresas, hace que no tengan capacidad de pedir financiamiento y, en consecuencia, permanezcan pequeñas si no es que tienen más posibilidades de morir.
Por ello, es importante cumplir con las obligaciones fiscales y estar al tanto de no ser sujeto a multas, porque esto puede mermar la salud financiera de las empresas de cualquier tamaño.
