En iLab hemos comprobado que para crear productos y servicios exitosos, es fundamental conocer las necesidades de los usuarios.
El Human Centered Design está revolucionando al mundo en cuanto a su potencial para crear servicios y productos innovadores y que encajan específicamente con lo que los usuarios necesitan.
Esta es tanto una filosofía para entender y resolver los problemas, como una metodología práctica que engloba a su vez distintas metodologías, entre estas, Design Thinking.
Esta forma de pensar centrada en personas permite crear soluciones en materia de tecnologías y productos que se basa en el análisis de las necesidades reales de las personas.
Design Thinking
El Design Thinking es una metodología iterativa y ágil, en la que se define primero un problema, se analiza de manera rápida el contexto y se propone y prueba una solución.
La consultora IDEO fue la que hizo popular este concepto y su filosofía, Human Centered Design, los cuales fueron creados por su fundador, Tim Brown.
El Design Thinking sirve para satisfacer las necesidades y los deseos de las personas de una manera tecnológicamente factible y estratégicamente viable. Brown, subió este concepto a la conversación pública a través de un texto publicado en la Harvard Business Review, en 2008.
«El pensamiento de diseño es un enfoque de innovación centrado en el ser humano que se basa en el conjunto de herramientas del diseñador para integrar las necesidades de las personas, las posibilidades de la tecnología y los requisitos para el éxito empresarial»,
Un caso de diseño centrado en usuarios
Un ejemplo del que Brown habla en el artículo escrito para la Harvard Business Review y que sirve para entender cómo funciona el pensamiento de diseño es el del fabricante japonés de componentes para bicicletas Shimano.
IDEO trabajó con Shimano utilizando Design Thinking y primero encontró que 90% de los adultos estadounidenses no andaban en bicicleta. ¿Por qué? El equipo interdisciplinario del proyecto descubrió que las tiendas minoristas hacían el proceso de compra de una bicicleta intimidante, además de que el peligro para andar en bici y la complejidad y costo de las bicicletas sofisticadas hacían que las personas dejaran de lado sus ganas de recordar su infancia andando en bicicleta.
Con esta información, crearon una marca completamente nueva de ciclismo, la cual empleaba estrategias de venta minorista distintas, la cual identificaba lugares seguros para andar en bicicleta y utilizaba un diseño distinto, todo lo cual estaba pasado para cubrir las necesidades de este grupo de adultos que era ‘intimidado’ por el ciclismo.
Partir del diseño centrado en usuarios puede transformar la manera en la que las organizaciones desarrollan productos, servicios, procesos y estrategias, sostiene Brown. Esto debido a que este enfoque reúne lo «deseable» desde el punto de vista humano con lo «tecnológicamente factible y económicamente viable».
Según IDEO, el pensamiento de diseño es todo a la vez, una idea, una estrategia, un método y una forma de ver el mundo.
En iLab, esta metodología es muy importante ya que permite conocer las necesidades de los clientes y hace posible la creación de productos, servicios y estrategias atinados y exitosos porque parte del diseño centrado en usuarios y, sobre todo, lo hace utilizando la menor cantidad de recursos.
Por ello, forma parte de nuestro Modelo iLab, el cual es una metodología única en su tipo, la cual fue creada como resultado del Programa Regional de Aceleración del Massachusetts Institute of Technology (MIT).
Entre las 32 metodologías que utiliza este modelo, se encuentra Design Thinking, con la cual permitimos que las personas diseñen soluciones innovadoras, superen sus propias limitaciones, potencien su creatividad y así, resuelvan desde una nueva perspectiva el problema o solución.
Desde 2014, iLab ha ayudado a fundar y crecer 30,892 negocios y ha apoyado a 103,180 empresarios y emprendedores a solucionar los problemas que aquejan al mundo. Conoce más sobre nuestra metodología y sobre nosotros dando clic en los enlaces.